Entrevista a Ricardo Gómez Tovar, autor de la novela histórica "La casa de los Cuatro Puntos Cardinales"




Amante del cine y de todas las artes, Ricardo Gómez Tovar nos presenta La casa de los Cuatro Puntos Cardinales, una novela histórica de narrativa cinematográfica que os hará revivir el amor de los años cuarenta. Un romance en medio de una guerra que os hará suspirar y encoger los dedos del pie mientras pasan las páginas. ¿No lo creéis? Echad un vistazo a esta entrevista.




¿Cuándo y por qué decides crear tu novela?

La casa de los Cuatro Puntos Cardinales surgió tras un viaje al Reino Unido, en el verano de 2012. El germen de la novela ya estaba ahí desde hacía tiempo. Siempre quise escribir un libro ambientado en la Inglaterra de la II Guerra Mundial, la que había visto en innumerables películas clásicas y en las novelas de los años cuarenta y cincuenta, y esta idea se fusionó con otro proyecto ambicionado desde la niñez: escribir una novela «con mansión incluida», a la manera de Retorno a Brideshead o Rebeca.

¿Por qué elegiste llamarla de esa manera?

Desde el principio tuve muy claro que, aunque se tratase de una historia de amor, debía llevar por título el nombre de la mansión donde se desarrolla la trama. Decía la escritora Rumer Godden en una de sus mejores novelas que «la casa es más importante que los personajes porque parece decirles: "En mí vosotros habitáis"», y creo que realmente fue eso lo que ocurrió en esta obra. La casa decidió anteponerse al nombre de sus personajes protagonistas, ya que iba a ser el lugar donde desarrollarían sus vivencias. Además, el título suena bastante cinematográfico, ¿no te parece?

¿Cuánto tiempo tardaste en reunir datos e información para poder escribirla?

Podría hablarte de las horas de investigación dedicadas a dotar a la obra de un fondo histórico convincente, pero eso resultaría muy fatigoso y aburrido. Lo importante es la magia que tiene lugar cuando ensamblas todos los elementos y algo especial sucede en la narración.

¿En qué ingrediente reside la fuerza de esta historia?

Las historias de amor ambientadas en tiempos de guerra tienen una fascinación especial. Hay algo irresistiblemente hermoso, y a la vez trágico, en ver a dos personas enamorándose mientras el mundo se tambalea a su alrededor. Las emociones y sentimientos que los lectores encontrarán en La Casa de los Cuatro Puntos Cardinales tienen la autenticidad propia de lo que se escribe con el corazón. A veces, incluso me daba la sensación de haber conocido en otra vida a la pareja protagonista. Fue increíblemente intenso. 

¿Cuál es tu personaje favorito y por qué?

Me lo pones muy difícil. Janet Stratton es una mujer culta, con una mentalidad adelantada a su época, que tiene la fuerza de reconocer sus miedos y superarlos. Hugh Alderman es más introvertido, esconde sus pies de barro, pero es un apasionado de los libros, al igual que yo. 

¿Cómo describirías tu estilo?

Prosa poética anglófila muy influida por el Hollywood de los años cuarenta.

¿Qué parte te resultó más complicada de escribir?

Para mí, lo más difícil fue recrear las escenas bélicas que aparecen en la novela, como el bombardeo de Canterbury. Puedo describir el amor, porque lo he sentido y lo siento todos los días, pero una experiencia de guerra no es algo que me resulte grato describir. Una cosa es verlo representado en una película o en una novela, y otra narrarlo con tu propia voz y saber que es algo que ocurrió en realidad, y no hace tanto tiempo. Se te ponen los pelos de punta.

¿Quién o quiénes fueron los primeros en leer este libro? ¿Cuál fue la primera impresión?

La primera persona que lo leyó fue mi mujer, y reaccionó de forma muy bonita y sencilla. Nos emocionamos los dos.

Si tuvieras que presentar este libro a nuestros lectores, ¿con qué palabras lo harías?

La Casa de los Cuatro Puntos Cardinales es una historia de amor sensible e idealista que vibra al son del cine norteamericano y británico rodado en los años cuarenta y cincuenta.

¿Por qué crees que nuestros lectores debiesen leer tu libro?

Quiero pensar que, más allá de mis aspiraciones como escritor, la historia que contiene el libro, así como sus símbolos literarios, puedan encontrar eco en otras personas de naturaleza afín (o de carácter diametralmente opuesto) y hacerles sentir mejor de alguna manera. Cualquier libro que uno escriba solo tiene sentido al encontrarse con otras mentes/almas que lo lean. Sin esa combustión que se produce en la intimidad de la lectura, es como si aún careciera de vida.

Tu pasión por el cine te ha llevado a crear un blog especializado, ¿de dónde surge este gusto por el celuloide?


 El cine clásico me fascina desde que tengo uso de razón. ¿Conoces esa frase que dice que “el ser humano no puede soportar demasiada realidad”?, pues desde niño me parecía que las películas se asemejaban más a lo que creía que debía ser la vida. No se trata de cinefilia (una palabra que me suena algo chirriante), sino más bien de toda una filosofía de vida. Hace dos años creé el blog Celuloide a las 5 en punto con el propósito de divulgar las películas de los años dorados del cine clásico británico, que tanto ha influido en el estilo de La Casa de los Cuatro Puntos Cardinales. En mi otro blog, además de textos cinematográficos, también publico relatos cortos, microrrelatos y traducciones de poemas de autores en lengua inglesa.








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