Entrevista a Juan Agustín Franco, autor del poemario Don Cipote sin Mancha
El humor es parte fundamental de la vida, por ello Juan Agustín Franco se atreve a publicar este libro de poemas en forma de tuits que contienen una de las temáticas más tergiversadas en la actualidad: el feminismo. Os invitamos a conocer al autor de Don Cipote sin Mancha a través de esta entrevista.
Explícanos, ¿qué es el sex-fi?
Sex-fi (sexo ficción) es un juego de palabras, cuya intención es sugerir
la necesidad urgente de nuevas relaciones sociales entre hombres y mujeres, más
igualitarias, no solo en la forma sino también en el fondo. Una llamada de
atención, irónica, hacia el machismo, especialmente el «amable», el cotidiano,
el que no hace ruido.
En la
actualidad existe una tergiversación tremenda en torno al feminismo como
concepto y acción. ¿Cómo lo defines tú?
El feminismo
es el sinónimo más potente y revolucionario de democracia. Sin feminismo no hay
democracia real. Sorprende todavía tanta falta de cultura democrática en pleno
siglo XXI.
Desde el
título del libro, podemos ver que éste alberga un sentido del humor muy
especial, ¿cómo tratas una temática tan actual y sensible con humor?
Las cosas más
serias pueden y deben decirse con humor. No hay motivo para asimilar el
feminismo siempre con emociones tristes y negativas. La alegría y el buen humor
están en la raíz de todo proyecto emancipatorio. Claro, eso molesta a quienes
ven peligrar sus privilegios y posiciones de poder.
¿Qué relación
tiene este poemario con el famoso Quijote de La Mancha?
La inspiración
inicial surgió releyendo precisamente El Quijote, en cuyo último capítulo de la
primera parte, el cincuenta y dos, aparecen unos hipotéticos Académicos de
Argamasilla llorando la aparente muerte del hidalgo caballero.
De hecho, Don
Quijote fue concebido por Cervantes como una crítica irónica de los libros de
caballerías. Lo raro es que nadie se haya percatado antes de la enorme crítica
feminista implícita en él, de esa intuición surge Don Cipote sin Mancha y las
Académicas de Argamasilla, mujeres que quieren representar y reivindicar el
valor del genio femenino, de su sabiduría y genialidad tantas veces usurpada e
invisibilizada.
Los poemas,
más que en versos, están escritos como tuits. ¿Cómo surge esta idea tan
original?
Curiosamente
es la propia realidad de «goteos» incesantes de mujeres asesinadas y su gran
repercusión social, mediática y en redes sociales, lo que contribuyó a plantear
el poemario desde esa óptica. De hecho, un verso no deja de ser un tuit
especial, lleno de emoción y esperanza, a la deriva... La poesía no es ajena a
la realidad.
¿Cuáles son
tus referentes literarios?
Me encantan
los poetas y las poetisas clásicas, desde Bécquer, Machado, Lorca hasta Rosalía
de Castro, Carolina Coronado… Mis novelas favoritas son Filomeno, a mi pesar de Torrente Ballester y Donde el corazón te lleve de Susanna Tamaro.
Me gustan
también los libros de ensayos, especialmente de feminismo. Algunos títulos
imprescindibles para entender el feminismo hoy son los cuatro siguientes: Mi
marido me pega lo normal (Miguel Lorente), Neoliberalismo sexual
(Ana de Miguel), Política sexual (Kate Millett), Feminismo en el
mundo global (Amelia Valcárcel). Además del Manifiesto Femen.
¿Cuál es tu
libro de poesía favorito? ¿Por qué?
Y de poesía tengo varios, aunque me inclino más por Veinte poemas de amor y una canción
desesperada de Neruda. También guardo recuerdos emotivos y adolescentes cuando
en clase de literatura la profesora nos enseñó La canción del pirata de
Espronceda y nos invitó a parafrasearlo como ejercicio de creación literaria.
¿Por qué tu
libro debe ser leído?
Es un poemario
vital, enérgico, alegre y reivindicativo. Quiere ser una contribución útil para
la lucha feminista y para el impulso de la cultura de la igualdad, que tanta
falta hace.
Te invito a
disfrutar y soñar un futuro mejor, más feminista, más igualitario, más
democrático, más poético, leyendo e imaginando lo que hoy parece imposible.
Twitter: @Agustin_Extrem
Facebook: Agus Franco
Comentarios
Publicar un comentario