Entrevista a María Cutiño, autora de Hombres, no dioses




Fidel Castro, el padre de la Revolución cubana, bajo la mirada cercana de la presidenta de una fundación. Conoced Hombres, no dioses de María Cutiño a través de esta entrevista.



Hombres, no dioses, ¿por qué?

Porque es una frase que dijo Fidel Castro, cuando hablaba al pueblo sobre los errores cometidos y los logros de la revolución.

¿Qué te motivó a escribir este libro?
Verdaderamente me motivo mi madre antes de morir, ella amaba a Fidel y era y fue fino a su muerte, comunista, nunca quiso cambiar de ideas, aunque entendía los errores no juzgaba la línea de la revolución.

Es un libro con una fuerte carga política, ¿cuál es el público ideal?
Creo que el público son muy variado desde los jóvenes que deberían conocer como fue la revolución cubana, en lo bueno y en lo malo, y de aquellos amantes de la revolución que son muchos en todo el mundo.

¿Existe alguna relación entre El llanto de las palmeras, tu libro anterior, y este?
Los dos libros hablan de Cuba, de su historia, de lo conflictual de la revolución, de los logros alcanzados durante la primera etapa del triunfo revolucionario.

Más que una novela es un libro histórico, ¿cuánto/cómo indagaste para poder escribir este libro?
Comencé ha indagar desde hace tres años, y lo demás que aparece en el libro son recuerdos conservados en una agenda dentro de una gaveta.

Como todo, hay dos formas de ver una misma historia; ¿gobierno o dictadura?

Según muchos cubanos es una dictadura y según otros un gobierno, mi criterio personal fue que desde que triunfo el primero de Enero del 1959 mi pueblo se convirtió como en una religión a Fidelistas, era la imagen la que despertaba la abnegación de millones de cubanos, era la figura del líder la que nos convenció a ser socialistas, y a pesar de los ataques de los gobiernos de EEUU sobrevivimos por muchos años con la ayuda de los países socialistas del resto del mundo, después de su muerte el carisma desapareció y fue entonces cuando hemos comenzado a ver los errores de los métodos utilizados, las carencias de todo lo necesario para vivir, donde los cubanos iniciaron un éxodo sin control de abandono al país, según mi criterio las cosas deberían cambiar radicalmente, dando voz y voto a sus habitantes, pero conservando una parte socialista que nos hizo y nos hará diferentes a otros gobiernos del sistema capitalista, un cambio será necesario pero nadie puede asegurar que el cambio será positivo para los más pobres, donde ahora tiene la educación y la salud gratis, donde mis hijos han estudiado sin pagar nada y donde se pasa necesidad pero siempre hemos sobrevivido.
No teníamos Internet pero si un medico, no teníamos ropa pero si libros, no teníamos carne pero si dentistas, no teníamos lujo pero si dignidad y coraje.


¿Cuáles son tus referentes literarios?
Hablo del poeta nacional José Martí, los libros escritos por Fidel antes de ser presidente y notas de periódicos y periodistas del ámbito internacional.

¿Cuál fue el último libro que leíste? Cuéntanos tu impresión.
Acabo de leer Rebeca de Daphne Du Maurier, la fluidez del lenguaje y la belleza de las palabras retumban todavía en mis recuerdos, aun pienso en Manderley como un lugar visitado no solo en mi imaginación sino en mi vida real.

¿Por qué crees que nuestros lectores debiesen leer tu libro?
Porque habla de Cuba, sus historias. Y hace una amplia explicación de los logros de la revolución en sus inicios.

Extiende una breve invitación al público a leer tu libro.

Invito a leer mi libro Hombre no dioses, como recuento histórico lleno de bellezas folclóricas, con un lenguaje fluido en sus historias y una narrativa adapta a cualquier público, a favor o en contra, aunque no es un libro político sino histórico.





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