Entrevista a Antonio Manzano Molina, autor del poemario "Entre horas"
Antonio Manzano Molina ha vivido el arte de manera muy cercana; sus estudios de Arte Dramático le han brindado una sensibilidad tal que le permite poner por escrito aquello que le inunda el alma. Entre horas es su último libro, y os invita a conocerlo. Mirad esta entrevista.
Leer primeras páginas
Háblanos un poco de ti.
Como todos,
o casi todos, empecé a escribir para ligar, aunque debo decir que con muy poco
éxito, ligaban mucho más los que bailaban, algo imposible para mí, por eso me
quedé con la escritura. Hoy por hoy no escribo para ligar, aunque en el fondo,
sea por algo bastante parecido, desde luego no por la fama, el éxito o el
dinero, ¿por qué? Quizá para que me quieran, como dijo un clásico.
¿Qué podremos encontrar entre las páginas de Entre horas?
Espero que
poesía. Poesía de la buena, con altura, con ritmo, deseo, musicalidad, con todo
lo que se supone que debe tener y a lo que aspira la buena poesía.
¿En qué ingrediente reside la fuerza de este
libro?
En el tiempo. En
el paso de los días. En el propio conocimiento.
La poesía
está viviendo un renacer muy exitoso, sobre todo entre la juventud. ¿Cómo
percibes esta nueva poesía?
La poesía es la clásica enferma con salud de
hierro. No la mata ni la matará nadie. Afortunadamente, por culpa de la
juventud, como siempre.
¿Qué quieres transmitir a través de este
libro?
No lo sé, es
una de las razones por la que se escribe, para saber. Sobre todo los poetas.
¿Cuáles son
tus referentes literarios?
Soy poco original, los clásicos. Y por hablar
de ahora, Bécquer, Rubén Darío, los Machado, Cernuda, Gil de Biedma, entre otros
parecidos.
¿Cuál fue el último libro que leíste? ¿Por
qué lo elegiste?
El último ha
sido Paisaje con grano de arena, de
Wislawa Szymborska. En estos momentos estoy releyendo Al faro de Virginia Woolf y una Antología
de Ángel González. Los elijo por lo buenos que son.
¿Por qué crees que nuestros lectores debiesen
leer tu libro?
Aunque solo
sea por esta entrevista tan simpática.
¿Y ahora qué, algún nuevo proyecto?
Ahora y
siempre. Los que escribimos no podemos ni sabemos hacer otra cosa. Estoy
corrigiendo una novela, cuando acabe, empezaré con otra, o quizá una obra de
teatro, o más poemas. Y ojalá que continúe, que no pare en mucho, mucho tiempo.
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