Entrevista a Eduardo Piqué, autor del libro Madrid, telón de fondo

Joaquín Sabina canta y declara que la primavera sabe que la espera en Madrid, porque es una urbe maravillosa, escenario de miles de historias, algunas que Eduardo Piqué ha querido compartirnos a través de su libro Madrid, telón de fondo. Os invitamos a conocer a este autor y su maravilloso libro de relatos a través de esta entrevista.



Leer primeras páginas

Háblanos un poco de ti.

Nací un buen día del mes de julio en Madrid, ciudad a la que me siento profundamente arraigado a pesar de algunas idas y venidas que, por motivos profesionales, me he visto en la necesidad de realizar viviendo algunas temporadas fuera de ella. La verdad es que tampoco lo lamento en absoluto porque creo que el hecho de conocer otras ciudades, otros países y otras culturas, aunque no sean muy diferentes, te ayuda a considerar las cosas desde un punto de vista más enriquecedor. De todas formas mi punto de referencia ha sido siempre y sigue siéndolo esta ciudad a la que he querido rememorar en el libro que ahora tenéis la amabilidad de publicarme.

Mi vida profesional está ligada en su totalidad a la enseñanza. Después de haber realizado mis estudios de Enseñanza Primaria en las Escuelas Aguirre y los de Bachillerato en el Colegio Calasancio, empecé y terminé la carrera de Magisterio en la Escuela Normal Pablo Montesinos, todo ello en mi ciudad natal. Después de dos años de ejercicio (1973-75) tuve que trasladarme, como muchos funcionarios en aquella época, a Cataluña, concretamente a la bonita localidad de San Felíu de Guíxols, donde permanecí otros dos años hasta mi regreso a la Comunidad de Madrid donde desarrollé mi trabajo durante un curso escolar. A partir de entonces empezó a picarme el gusanillo de la movilidad y decidí trasladarme a Francia donde trabajé como profesor para los hijos de los residentes españoles en la Región Parisina y más tarde en el mismo París durante seis años. Durante todo este periodo pude sacar tiempo para obtener la licenciatura en Filología Española por la UNED. Vuelta a Madrid y a Alcalá de Henares, ciudad de la que guardo un grato recuerdo pues permanecí ejerciendo en ella diez años, aunque realmente viviera en Madrid. De nuevo Francia, esta vez otros seis años entre Besançon y Aviñón. Otra vez tres años en Madrid, para salir por último a Suiza (Lausanne y Ginebra) y finalizar mis cuatro últimos cursos en Madrid capital. Un poco movido todo pero uno es así.

En cuanto a mis aficiones, pueden centrarse fundamentalmente en la literatura, el cine, la música (especialmente la clásica, aunque me suele gustar toda siempre y cuando sea música, no ruido) y largos paseos por la ciudad o por el campo.

¿Qué podremos encontrar entre las páginas de Madrid, telón de fondo?

Madrid, telón de fondo es un libro misceláneo. Solo con consultar el índice el lector se dará cuenta fácilmente de ello. En él aparecen, en forma de breves relatos, tanto aspectos exclusivos de la ciudad de Madrid como historias de sus personajes —algunas reales, otras no tanto— pero la mayoría reales y también algunos capítulos dedicados de manera muy somera a la visión que distintos autores de nuestra literatura, desde Lope de Vega hasta Camilo José Cela, pasando por los de la Generación del 98 o Ramón Gómez de la Serna, nos han dado sobre ella.

Me viene en este momento a la cabeza una frase de Francisco Umbral que suscribo totalmente: Madrid es un pretexto para contar historias, y es que hay tantas historias que contar en esta urbe tan variopinta. De manera que en este libro hay sencillas reflexiones y experiencias sobre distintos temas y aspectos que tienen lugar en la vida de cualquier ser humano y en cualquier sociedad (unos, positivos; otros, no) como pueden ser la concordia, la envidia, el amor en la senectud, la casualidad, la soledad, la coherencia, la sinceridad… acompañadas de la visión panorámica que sobre esta ciudad dejaron nuestros literatos y del recuerdo de aquellos personajes que forman y que formaron en su día esa colmena con la que Camilo José Cela tan acertadamente puso el título a su novela. Todo ello en un Madrid como telón de fondo.

¿En qué ingrediente reside la fuerza de este libro?

Ya lo dice realmente el título, en la conversión de Madrid como telón de fondo. El convertir nuestra ciudad en el escenario de lo que ocurre, de lo que se dice, de lo que se vive, ese es el ingrediente en el que reside su fuerza. Indudablemente todo eso que ocurre, se dice o se vive podría darse probablemente en cualquier otro lugar, pero se da en Madrid, porque este libro quiere ser en cierto modo un canto a Madrid, un canto indirecto y discreto pero también claro y evidente.

¿Cuál es el personaje favorito de tu libro? ¿Por qué?

¡Qué pregunta más difícil! Es como si le preguntaras a un padre que a qué hijo quiere más. Me das a elegir entre la delicadeza de la señora Juana, el coraje de la señora María, la sencillez y la cercanía del señor Fermín, el tesón del hijo del carbonero, la simpatía y la espontaneidad de Juanito y la dedicación que le brinda su abuelo, la prudencia del señor Leal, el saber estar de Lourdes, la coherencia de Juan Martín… Me lo pones muy difícil. La verdad es que siento ternura por estos personajes. Hasta tal punto que no puedo decantarme por ninguno en particular. Si piensas un poco y trasladas esto a la vida real, verás cómo te encuentras en la misma encrucijada.

¿Qué quieres transmitir a través de este libro?

Sencillamente la comprensión y la afinidad que se le puede tener a la ciudad donde uno nace o vive, que no es tan diferente de tenérselas a los que en ella viven también.

Además, acercar a los lectores, de la manera más elemental y sencilla, a una reflexión, o al menos consideración de esos aspectos de la vida del ser humano a los que he aludido antes, que en este caso tienen lugar en Madrid (ese es el pretexto) pero que se dan también en cualquier otro lugar.

Por último, el valor que reconocidos literatos conceden a nuestra ciudad al ocuparse de ella en sus escritos.

¿Cuáles son tus referentes literarios?

Fundamentalmente a los que aludo en el libro: Lope de Vega, Pérez Galdós, Mesonero Romanos, Azorín, Pío Baroja, Unamuno, Ramón Gómez de la Serna, Camilo José Cela. Aunque no los menciono en este libro también lo serían Antonio Machado y Ramón J. Sender. Siento cierta predilección por la Generación del 98.

¿Cuál fue el último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?

Caperucita en Manhattan. Hace algún tiempo leí dos libros de Carmen Martín Gaite que me gustaron bastante: uno muy breve, El balneario y el otro, Entre visillos. Tenía curiosidad por saber de qué iba la obra de esta autora en esta ocasión.

Y ahora qué, ¿algún nuevo proyecto?

Hay cosas en la cabeza pero lo que se dice proyecto, proyecto, la verdad es que no. Debe ser necesario dejar pasar algún tiempo para que todo madure.