Entrevista a Bruno Brizuela, autor de Las extravagantes y enmarañadas historias del Sr. Corvus




Bruno Brizuela es un joven artista que ha querido plasmar su visión del ser humano en Las extravagantes y enmarañadas historias del Sr. Corvus, un libro de relatos de diversas temáticas conectados entre sí. Os invitamos a conocer más a través de esta entrevista.


Leer primeras páginas



Háblanos un poco de ti.

No estoy seguro de qué les puedo decir, se me hace difícil contestar cuando no tengo una pregunta específica en frente. Tengo un espíritu inquebrantable que más de una vez intentaron quebrar, una mente prodigiosa que más de una vez engañaron, una vista certera que más de una vez ignoró algo, también tengo un corazón que late con la pasión del amor y un altruismo sin límites, me encanta ayudar y sentirme útil, un amor y respeto muy profundo hacia los animales y la naturaleza en general, también tengo una constante sensación de inconformidad que me remueve las entrañas dejándome al borde de un ataque de ansiedad y que me obliga a mantenerme constantemente en movimiento. Soy carismático y me gusta conocer gente nueva, aunque en el fondo no confío mucho en las personas y muy en el fondo de mi corazón, para equilibrar la balanza, habita un odio y una ira grabadas con fuego desde mi niñez, odio e ira que ahogo día a día con el calor del amor y la convierto en un motivante más para cumplir mis objetivos.

¿Qué podremos encontrar entre las páginas de Las extravagantes y enmarañadas historias del Sr. Corvus?

Entre esas páginas van a encontrar personas que se aman, personas que se odian, historias sobre la magnificencia del ser humano y la su ruin naturaleza a la par de su maravilloso ingenio. También pueden encontrar un mensaje dicho en ahogados gritos desesperados por ser escuchados y, si observan con ojo clínico y prestan atención, también pueden encontrar patrones, sinfonías y secuencias que esconden un mensaje, una verdad mucho más profunda y escalofriante, algo que fácilmente puede ser confundido con fantasía pero que no podría estar más sujeta a la realidad que se esconde a diario en nuestro entorno.

¿En qué ingrediente reside la fuerza de este libro?

No creo que la fuerza de este libro resida en la violencia, ni en sus personajes tan particulares, tampoco en lo enmarañado de su trama o en las situaciones en las que fue escrito, creo que la fuerza de este libro reside en la pasión y no en la pasión por describir una sensación o un sentimiento, sino en la pasión misma que se siente al escribir, esa sensación tan hermosa y particular de estar haciendo arte de verdad, de sentir que estás mandando un mensaje y que después de tu muerte son estas palabras las que van a perdurar y la pasión con la que fueron escritas.

¿Cuál es el personaje favorito de tu libro? ¿Por qué?

No creo tener un personaje favorito la verdad, cada uno tiene lo suyo, desde Mike, con su forma tan particular de ver las cosas y su aún más particular compañero, hasta Bruno y su travesía para descubrirse a sí mismo, pero si tuviera que elegir uno creo que elegiría a Darkos por ser el más fascinante de todos, al menos ante mis ojos.

¿Qué quieres transmitir a través de este libro?   

A través de este libro quiero transmitir los altibajos que puede llegar a tener el ser humano, lo magnífico y cruel que este puede llegar a ser. También con un humilde aporte quiero reivindicar el significado de la palabra «arte» y devolverle a esta el brillo que tuvo un tiempo atrás. Quiero trasmitirle al mundo de lo que soy capaz y mostrarles que el ser humano no está perdido, que hay esperanza, que no siempre es malo, que no siempre contamina, que no siempre asesina, también ha creado maravillas tecnológicas, ha curado cientos de enfermedades que él no creó; que en el fondo, su verdadera naturaleza es crear y moldear, la misma naturaleza que se esperaría de un dios.

¿En qué referentes literarios te inspiraste para escribir este libro?

La verdad no creo haber tenido alguna referencia literaria, imagino que si se lee con atención mi escrito se encuentran similitudes con algunos escritores que habré leído y cuyos métodos de expresión se guardaron en mi subconsciente, pero durante el periodo en el que escribí este libro no estaba leyendo nada y tampoco había leído nada desde hacía varios meses.

¿Cuál fue el último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?

El último libro que leí fue Veinte mil leguas de viaje submarino de Julio Verne. Lo encontré por casualidad entre mis cosas y desde mi temprana adolescencia que no lo leía, así que decidí volver a leerlo, pero muy a mi pesar todavía no tuve el tiempo necesario como para terminarlo.

¿Cuál es tu visión acerca del panorama literario actual?

Para contestar sinceramente, y arriesgándome a ofender a más de una persona o que me tachen de altanero o arrogante, mi visión del panorama literario actual y sobre el arte en general es pésimo, hasta llega a ser casi ofensivo. Actualmente, el arte se convirtió en un negocio más que en una pasión y no culpo a nadie que escriba cosas trilladas o haga música superflua, después de todo, vivimos en el mundo real y en este mundo se necesita dinero para prácticamente cualquier cosa que queramos hacer; sin embargo, eso no es una excusa para mancillar la más pura de las expresiones humanas. Actualmente se pueden ver escritores de renombre que ni siquiera se esfuerzan en sus historias a sabiendas de que van a vender de todos modos y escritores con un enorme talento que no pueden llegar a mas allá de unos pocos lectores; también se ven músicos que no expresan nada en particular y que solamente copian el estilo y las letras del que tienen al lado, cantan o rapean arriba de una base sencilla y monótona y ya está, eso es «arte». Pintores que, literalmente, solo dan una pincelada en sus lienzos y dicen que en eso expresan algún tipo de emoción, no fue hace mucho que hicieron pintar a un chimpancé sobre un lienzo y muchos críticos de renombre quedaron fascinados por la pintura del primate creyendo que había sido una obra humana, eso sinceramente habla muy mal del nivel de intelecto que hay entre los críticos de arte, pero volviendo al tema de los artistas, aquellos que optan por la salida fácil y monetaria lastiman a aquellos que dejan todo y dan todo de sí para crear y moldear una obra artística.

Y ahora qué, ¿algún nuevo proyecto?

Ahora me hace falta terminar los dos libros restantes que componen esta trilogía, después de eso pienso empezar a hacer música otra vez. Sinceramente, uso la escritura para financiar mi música, irónico viniendo de alguien que critica el arte comercial, pero bueno, c'est la vie, y todo esto para después aprender a dirigir y empezar a desarrollarme como cineasta para darle forma a mis guiones, pero la verdad es que estas tres cosas son solamente pasos hacia un objetivo mayor, son solo medios para alcanzar un fin específico y en cuanto al objetivo que me mueve a hacer todas estas cosas, aquello que me llevo a volverme artista en primer lugar es la sencilla y a la vez ardua tarea de cambiar el mundo, sin embargo no soy tan altanero como para creer que puedo cambiar el mundo, pero el arte me ofrece un medio de comunicación sin igual para llegar a aquellas personas con el espíritu inquebrantable que hace falta para llevar a cabo tal ardua travesía y en cuanto a ¿Qué es lo que quiero cambiar del mundo? Bueno eso es más que la expresión del ser humano, más que la sobrepoblación de artistas que solamente buscan llenarse los bolsillos, no, lo que busco cambiar es algo más profundo y a la vez más perverso.


ISBN:  978-84-18097-68-3

Número de páginas: 226
Formato: 150×2320
Autor: Bruno Brizuela

Sinopsis: 

Cuentos de diferentes géneros con conexiones entre sí; una intrincada historia que nos remonta hasta las humeantes tierras de la Segunda Guerra Mundial y los páramos más exóticos en la profundidad de una isla situada en el medio de la nada. Extraños personajes y una historia de trasfondo que difícilmente puede deslumbrarse, pero más extraña que la propia obra en sí.










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