Entrevista a José Luis Charro Caballero, autor de Un cazador observador
Número de páginas: 234
Formato: 150×230
Autor: José Luis Charro Caballero
Sinopsis:
El autor expone, a partir de una selección de sus artículos publicados en revistas de divulgación durante los últimos años, cómo han evolucionado la caza y el cazador hacia postulados conservacionistas. En la actualidad, la actividad cinegética exige, a quien la practica, el abandono de lo que fueron lugares y prácticas comunes hace tiempo y así, el cazador moderno es un naturalista estudioso del medio natural. El acto de la caza empieza por observar para interpretar, lo que da lugar a la mayor herramienta de conocimiento del hombre campero: la experiencia. De este modo, el cazador actual, conservador y observador, antepone en sus jornadas venatorias las actividades que son esenciales para la conservación de la fauna, antes mismo que la propia captura de animales. Así es la comprensión e interpretación del medio natural, que mediante una buena gestión lleva a la necesidad y a la oportunidad de cazar, siempre de modo selectivo.
Háblanos un poco
de ti.
Soy ingeniero de montes, trabajo en Argentina y a la vez que escribo
estoy doctorándome, trabajo en una tesis que aplica la teoría matemática de los
juegos de estrategia a la gestión cinegética.
¿Qué podremos encontrar entre las páginas de Un cazador observador?
Se trata de una
selección de artículos medioambientales de divulgación, escritos en diversas
revistas y también varios inéditos en los que se aprecia la evolución del
cazador contemporáneo como observador del medio natural.
¿En qué ingrediente reside la fuerza de este
libro?
La fusión de conocimientos técnicos, de investigación y aplicación
práctica experimental, producto de mi trabajo como gestor de espacios
naturales.
¿Qué quieres
transmitir a través de este libro?
Que la caza es
una herramienta de gestión muy valiosa, pero también puede ser un desastre para
la fauna silvestre si no se aplica con medida y criterio técnico.
¿Cómo describirías tu experiencia desde
el proceso creativo hasta tener el libro entre tus manos?
Tengo mi método. Desde que surge la idea, la estructuro, hago la primera
escritura, la segunda, la reestructuro… Pongo el punto final. Y a partir de ahí
empieza el trabajo duro hasta llegar al nivel que yo mismo me exijo. En este
caso además el proceso de recolección de datos y las observaciones de campo han
sido parte del proceso de creación y de mi trabajo día a día.
¿Cuál fue el
último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?
El Abisinio, de Jean-Christophe Rufin.
A veces leo para
formarme y otras como entrenamiento para tener agilidad mental a la hora de
escribir y por supuesto para divertirme, me encanta leer.
¿Cuál es tu visión acerca del panorama
literario actual?
Hay muchos
lectores tanto en formato digital como físico y gran abundancia de buen
material a su alcance.
Y ahora qué, ¿algún nuevo proyecto?
Sí, en la línea de ensayos de temática medioambiental estoy ultimando un
libro sobre consumo consciente. Es
una obra que trata sobre varios temas de actualidad de repercusión ecológica y
social como, por ejemplo: El agua, el sufrimiento animal, la gestión de los
recursos naturales, la alimentación o el transporte…
También, estoy trabajando en una nueva novela, de temática contemporánea.
Muy lejos de los temas medioambientales que acostumbro a escribir
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