Entrevista a María Jesús Moral Molina, autora del libro Una bruja sin verruga

 

María Jesús Moral Molina

María Jesús Moral Molina es una joven escritora granadina, licenciada en Psicología y con una gran pasión por la literatura infantil. David Moral Molina, es un ilustrador granadino, graduado en Bellas Artes, apasionado y eterno aprendiz del dibujo. Entre los dos han creado el libro Una bruja sin verruga, una preciosa historia sobre una pequeña brujita y sus aventuras en la escuela de brujería. Os invitamos a conocer más a través de esta entrevista.


Una bruja sin verruga

ISBN: 978-84-19595-50-08

Número de páginas: 88


Formato: 240 x 170


Colección: Adarve


Autor: Una bruja sin verruga


Sinopsis: Casilda es una brujita ingeniosa y perseverante que está a punto de empezar la escuela de brujería, pero… ¡Oh! Parece que le falta algo muy importante para ser una verdadera bruja y poder entrar… ¡Una verruga! ¿Se le ocurrirá algo para cumplir el requisito? O… ¿Se dará cuenta de que hay algo más importante que una verruga para ser una bruja de verdad? ¡Descúbrelo junto a ella y su gran amigo Sombras!



Leer primeras páginas


Háblanos un poco de ti.

Soy licenciada en Psicología, aunque desde muy pequeña me he sentido especialmente conectada al mundo artístico. Sin embargo, mi trayectoria profesional ha sido resultado de la fusión de la Psicología y la Educación, realizando trabajos como docente, monitora, orientadora e impartiendo charlas educativas en algunos colegios o institutos.

A nivel personal, me considero una persona empática, comprensiva, sociable y sensible, a la vez que disfruto de momentos de soledad y reflexión, que son, a mi parecer, de gran importancia para el desarrollo y crecimiento personal.

 

¿Qué podremos encontrar entre las páginas de Una bruja sin verruga?

Mi intención al escribirlo es que hubiera un poco de todo, así que espero que podáis encontrar tanto humor como drama, a la vez que diversión, inocencia, magia, lógica, amistad, solidaridad... Y, sobre todo, cariño, ese que tanto he puesto al escribirlo y ese que me ha empujado a mostrar este cuento a los demás, ya que, tomando como referencia a “El Principito”: el amor es lo único que crece cuando se comparte.

 

¿En qué ingrediente reside la fuerza de este libro?

Sin duda, en la resiliencia. Esta palabra proviene del ámbito de la Psicología, aunque últimamente se ha extendido a la población general y está cobrando mucha importancia, cosa que me alegra profundamente. En Casilda, la protagonista, podemos ver cómo pone en marcha todo su ingenio y recursos para ir salvando los problemas con los que se va encontrando. De esta manera, ella va inventando nuevas formas de conseguir lo que quiere, sin darse cuenta de que realmente está comenzando por el  camino del autoconocimiento para concluir en la autoaceptación. Desde mi punto de vista, este sería el recorrido vital que todos los seres humanos estamos llamados a realizar.

 

¿Qué quieres transmitir a través de este libro?

A grandes rasgos, el cuento es una metáfora sobre la búsqueda de uno mismo dentro los cánones marcados por la sociedad. Entonces, pienso que nuestra tarea es diferenciar lo que nos pide el entorno que le demos y lo que hay único en nosotros para ofrecerle. De manera que, con el cuento, me gustaría transmitir la capacidad y el valor de mirar dentro de nosotros para conocer nuestras virtudes, agarrarnos a ellas y no soltarlas, utilizándolas para ser felices y mejorar nuestro alrededor.

 

¿Cuál fue el último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?

Hablando de cuentos, el último libro que he leído es “Déjame que te cuente…”, de Jorge Bucay. Me gusta leerlo cada cierto tiempo porque me ayuda a conectar con mi interior, con pensamientos y sentimientos a niveles profundos.

Es curioso que, dependiendo de cuándo se lea, puede interpretarse de manera diferente el trasfondo de cada cuento, pareciendo acomodarse al momento vital en el que uno se encuentre. Y esa es una de las características mágicas de los cuentos: pueden ayudarnos a entender emociones y situaciones complejas de una manera sencilla y amena.

 

Y ahora qué, ¿algún nuevo proyecto?

Sí, mi mente no para, y ya tengo otra idea para escribir el próximo cuento. Es de una temática diferente, y quiero hacer una mezcla de humor, pillería e ingenuidad. Espero que, tanto los más pequeños como los no tan pequeños, lo disfruten mucho cuando lo lean, igual o más que yo escribiéndolo.


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