Entrevista a Jean Garciant, autor del libro La buscona desabrida
Jean Garciant es un escritor, doctorado por la Facultad de Letras y Ciencias Humanas de Besançon, Francia, en la especialidad de Estudios Ibéricos e Iberoamericanos. Entre sus obras: El sarcófago visigodo, Tabarnia en tiempos de Wamba, Adiós arcadia Puigdemoniaca y Las secuelas del silencio. La buscona desabrida nos traslada al Oviedo de los años 70. Os invitamos a conocer más a través de esta entrevista.
Formato: 150 x 230
Colección: Adarve
Autor: Jean Garciant
Háblanos un poco
de ti.
Soy doctor en
literatura comparada, en estudios ibéricos e iberoamericanos. Con una
licenciatura de Historia del arte. Profesor en la Universidad del Franco
Condado, Besançon, Francia.
Enseñé en dicha Universidad, así como en el
Instituto L. Pasteur.
He publicado
varias novelas, entre las cuales: EL SARCOFAGO VISIGODO, TABARNIA EN TIEMPOS DE
WAMBA, ADIOS ARCADIA PUIGDEMONIACA, DEL HOSPICIO AL RECONQUISTA, y esta obra
venidera: LA BUSCONA DESCARRIADA.
¿Qué podremos encontrar entre las páginas
La buscona desabrida?
LA BUSCONA DESCARRIADA está basada en un hecho
real, cuyo personaje principal es una mujer, que, pese a poder disfrutar de todas
las larguezas de la sociedad y vivir con holgura, se siente humillada, en su
incesante peregrinación hacia el goce supremo del libertinaje y de la maldad.
Su frustración culminará con la metódica destrucción de todos los que gravitan
en torno a su deslumbrante ego.
¿En qué ingrediente reside la fuerza de este
libro?
El odio a sus parientes y semejantes será el faro que alumbrará y guiará su
vida hasta el final. Su perversión culmina con la destrucción del núcleo familiar.
¿Qué quieres
transmitir a través de este libro?
Que resulta vano querer sofrenar el impetuoso temperamento de aquellos
que, voluntariamente, se proponen destruir a sus parientes, en castigo a sus propios
errores o, peor, a la propensión de sus allegados a la benevolencia. Eva
descarta la posibilidad de amar a quienes se sacrifican por su bien, y hace
suya la sátira de Juvenal: “nadie se vuelve perverso de golpe”.
¿Cómo describirías tu trayectoria de
escritor desde la primera publicación hasta esta última?
En tanto que
escritor, siempre he deseado permanecer firme y fiel a mis convicciones
políticas, siguiendo las vías de la razón y de la cordura. Lo principal es
decir lo que se siente y no someterme socarronamente a la exquisita sentencia
de los aduladores, allanándome a sus expectativas. Decir la verdad es mi ley;
mi fuerza, hablar justo.
¿Cuál fue el
último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?
El DECAMERON, de Giovanni BOCCACCIO porque, dicha obra pone de relieve la
decrepitud, desaliño y corrupción de los ministros de la iglesia de su tiempo. Su
sátira podría servir de modelo actualmente, para denunciar, públicamente, a los
que, por el poder que detienen, (me refiero a los mafiosos políticos que nos
gobiernan) son los directos sucesores de la corrupta y toda poderosa iglesia
del Renacimiento.
También he leído, con suma atención,
la apasionante obra de Pascal Bruckner, UN CULPABLE CASI PERFECTO, en la que nos
muestra las derivas de nuestros perversos y todopoderosos políticos, capaces de
renunciar a los valores tradicionales de su país, para imponer, como norma de
conducta venidera, las elucubraciones de los revisionistas y enmendadores del
curso de la historia.
Y ahora qué, ¿algún nuevo proyecto?
Trabajo sobre el
difícil tema de la soledad de aquellos que, discretamente, se sacrifican, para
que la vida de los que sufren de enfermedades incurables, en torno suyo, sea lo
menos dolorosa posible. Es un tema que exige introspección y recato, abnegación
y tenacidad.
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