Entrevista a Marta Ramírez, autora del libro La bala del recuerdo

 

Marta Ramírez es una joven escritora riojana y estudiante de Educación Social en la U. Complutense de Madrid. Sus inicios en la poesía se remontan a la participación en el fanzine Ella, poema en 2019. Desde entonces, con la ayuda del espacio cultural joven de la Gota de Leche de Logroño, ha participado en varias publicaciones como Artefacto Magazine (2019), He(r)art (2019), Tan Tan (2020), Al compás de los versos (2021, 2022 y 2023) y Artefacto-Moda (2023). La bala del recuerdo es un poemario personal e intimista.Os invitamos a conocer más a través de esta entrevista.

ISBN: 978-84-10082-66-3

Número de páginas: 100

Formato: 150 x 230

Colección: Verso y color

Autor: Marta Ramírez

Sinopsis: Esto no es un libro, soy yo. Son todas las palabras que nunca dije, los momentos que no podrán borrarse de mi mente, un atardecer perdiéndose en el cielo y recordándome que nada es para siempre. Un incendio atrincherado en mi pecho, tres seises seguidos, la piedra en medio de mi camino, el recorrido de mis vértebras en dirección al vacío. Es el intento de robarle el fuego al sol para quemarme la cara, abrirme los poros y ver cómo sale de ellos dolor; de entender cómo las historias se acumulan y me construyen una joroba que me acerca, poco a poco, a la tierra que me abrazará cuando ya no me pueda abrazar nadie. No es un libro, soy yo. Es un «adiós» con sabor a «hasta luego», un «debería aprender a dejar ir a quien quiero», un «me voy, pero luego vuelvo», un cóctel molotov capaz de explotarte en los dedos; cuarenta y dos disparos en forma de verso.

Leer primeras páginas

Háblanos un poco de ti.

Desde pequeña he estado ligada al arte, ya sea dibujando, tocando la guitarra o escribiendo. Empecé a escribir poesía cuando era pequeña, antes incluso de que supiera qué era la poesía, casi de forma instintiva o motivada por las poesías de un libro de Gloria Fuertes que me encantaba cuando era niña.Fuera del plano artístico he de decir que llevo muy mal madrugar, que soy un poco desastre y que mi cena favorita es la cebolla con atún.

 

¿Qué podremos encontrar entre las páginas de La bala del recuerdo?

Un lugar seguro. El arte y la poesía deben ser siempre un lugar seguro donde todo y todos tiene cabida y donde los sentimientos, sean cuales sean, son bienvenidos. Siempre he pensado que vivimos demasiado rápido, que no nos paramos a observar o a sentir y creo que los libros pueden ser uno de esos refugios seguros donde poder bajar el ritmo de la vida y reflexionar.

 

¿En qué ingrediente reside la fuerza de este libro?

En la poesía, creo que la poesía es el ingrediente perfecto para procurar que la gente sienta o se emocione. Esa es también mi meta como escritora, tratar de que la gente sienta algo leyéndome, porque las emociones son un nexo común entre todas las personas. Quiero decir, en un panorama actual en el que prima la individualidad la poesía es el caldo de cultivo perfecto para hacer crecer la colectividad y el sentimiento de humanidad.

 

¿Qué quieres transmitir a través de este libro?

A través de este libro quiero transmitir muchas cosas, tantas como poemas y versos tiene el libro. Entre ellas quizá destacaría lo importante que es la resiliencia y también el hecho de que el recuerdo es inevitable y tenemos que aprender a convivir con él, aunque en realidad la magia del arte es que no solo se reduce a lo que el artista quiera transmitir.

Creo que la propia vida del espectador afecta a la forma de entender y sentir una obra y que mi libro puede transmitir cosas muy diversas (incluso inimaginables para mí) porque diversas van a ser también las personas que pueden leerme.

 

¿Cómo describirías tu trayectoria de escritor desde la primera publicación hasta esta última?

Siempre digo que soy un conjunto de personas que han creído en mí desde la primera vez que me subí a un escenario a recitar poesía, así que mi trayectoria se define por eso, por los fallos, por las ganas, por la ilusión, por los miedos, por los nervios y por el continuo aprendizaje que me han llevado a la versión que soy ahora, aunque esta versión también seguirá creciendo y cambiando.

 

¿Cuál fue el último libro que leíste? ¿Por qué lo elegiste?

Un recopilatorio de poemas de Pedro Salinas. Lo escogí porque me apetecía cambiar de aires. Quería salir del marco de poesía actual que suelo leer para volver atrás en el tiempo y leer a otros y a otras poetas que me han precedido porque creo que es una forma de aprender y crecer como escritora.

 

Y ahora qué, ¿algún nuevo proyecto?

Llevo tiempo queriendo combinar mis estudios en Educación Social con la poesía. Creo que la educación social puede aplicar la poesía como metodología y que la poesía puede  estar comprometida con la educación social.

Me encantaría dar talleres de poesía a diferentes colectivos e intentar que esta llegue a todo el mundo. Creo que la poesía debe de ser un género de todos y para todos porque, al fin y al cabo, poesía es tener algo que decir y creo que todo el mundo tiene muchas cosas que decir.